Hoja de Ruta para un Chile Circular al 2040

En julio de 2021 el Ministerio de Medio Ambiente publicó la Hoja de Ruta para un Chile Circular con ambiciosas metas al 2040, contempla 4 ejes de acción: Innovación Circular, Cultura Circular, Regulación Circular y Territorio Circular y 118 acciones concretas para lograrlas. Fruto de un trabajo transversal y amplio de todos los sectores de la sociedad el documento visiona que al año 2040 la economía circular regenerativa impulse a Chile hacia un desarrollo sostenible, justo y participativo que ponga el bienestar de las personas al centro; esto, a través del cuidado de la naturaleza y sus seres vivos, la gestión responsable y eficiente de los recursos naturales, y una sociedad que usa, consume y produce de manera sostenible y consciente, fomentando la creación de empleos verdes y oportunidades para personas y organizaciones a lo largo del país.  

 

En el año 2019 a portas de la COP25 el Ministerio de Medio Ambiente (MMA), en conjunto con el Ministerio de Economía (MINECON), la Corporación de Fomento de la Producción (CORFO) y la Agencia de Sustentabilidad y Cambio Climático (ASCC) iniciaron un proceso de elaboración de una hoja de ruta de economía circular para acelerar la transición del país a este modelo económico.

El trabajo que contó con la participación de un Comité Estratégico (33 representantes del mundo público, privado, sociedad civil y academia), un comité Ejecutivo y un comité Asesor Internacional que incluía a distintos ministerios y actores como Ellen Macarthur Foundation, BID y OCDE concluyo a mediados de este año.

La fase inicial de diagnóstico en 2019  que incluyo talleres y entrevistas a actores clave identificó diversas brechas y oportunidades que el país tiene para avanzar en una ruta circular, entre ellas cabe destacar la falta de financiamiento e industrialización, el desarrollo de capital humano capacitado y con conocimientos técnicos en todos los sectores económicos, la necesidad de una regulación que vaya en línea con la innovación y su escalamiento y la importancia de establecer mecanismos de colaboración público-privados, entre otros.  Finalizado este diagnóstico, en mayo del 2020 el comité estratégico desarrolló una visión compartida de largo plazo y posteriormente una estrategia y plan de acción para alcanzarla. En esta etapa se constituyeron con más de 100 actores 11 mesas temáticas para discutir y proponer ideas y acciones en torno al desarrollo de mercados, regulación, territorios y economías locales, ecodiseño, prevención, reuso y reparación, valorización energética, escalamiento de la innovación de la industria 4.0, educación y cultura, incentivos y desincentivos a la ciudadanía, incentivos y desincentivos a la empresa.  El resultado de estas mesas se plasmo en un primer borrador publicado para consulta ciudadana en diciembre de 2020. Dicha consulta ciudadana recibió más de 500 observaciones y permitió mover el foco del texto desde el manejo de residuos hacia uno que pone en el centro la calidad de vida de las personas, el uso eficiente de los recursos, la innovación y una mayor consciencia con la urgencia climática de nuestro planeta.

 

La Hoja de Ruta final, aprobada por el Consejo de Ministros para la Sostenibilidad, que ha sido publicada en julio de este año establece metas intermedias al 2030 y de más largo plazo al 2040:

Fuente: Hoja de Ruta para un Chile Circular al 2040

Para lograr estas metas se han establecido 4 ejes de acción: Innovación Circular, Cultura Circular, Regulación Circular y Territorios Circular, con 27 iniciativas generales que a su vez contemplan 118 acciones concretas que deberán ser ejecutadas de manera colaborativa entre los distintos actores del país.

Los focos de acción por cada eje son múltiples y presentan un gran desafío, pero aun más la oportunidad de acelerar la transición hacia un modelo de producción y consumo sostenible para Chile y su ciudadanía. Los focos de acción para cada eje son los siguientes:

Innovación circular: se busca que haya visión de ciclo de vida en el diseño de productos, servicios y procesos, más modelos de negocios circulares, crecimiento en la valorización de los residuos industriales, mayor financiamiento para proyectos de inversión circulares, y acelerar la investigación, desarrollo e innovación para la economía circular.

Cultura Circular:  se busca que migremos a estilos de vida sostenibles fundados en hábitos y prácticas circulares, un mayor foco del sistema educativo en la sensibilización ambiental y las habilidades para la economía circular, mejorar la transparencia y trazabilidad en torno a la gestión de los residuos, y más visión de futuro en el monitoreo del progreso hacia un desarrollo sostenible

Regulación Circular: se busca establecer instrumentos económicos para el fomento de la economía circular, complemento del enfoque sanitario con un enfoque de economía circular en la regulación de residuos, aumentar incentivos para el involucramiento de la ciudadanía en la solución a problemáticas de la economía lineal, y mejorar la colaboración y trabajo conjunto entre actores clave para la transición.

Territorio Circular: se busca que haya más presencia de los principios de la economía circular en las trayectorias de desarrollo regionales, más participación de la ciudadanía en las decisiones que afectan a su entorno local, preferencia por técnicas de producción que permitan cuidar y aumentar el capital natural del país, y el desarrollo de infraestructura y equipamiento que habilite soluciones circulares.

 

Hoy el Ministerio está trabajando para activar una gobernanza abierta y colaborativa que ponga en marcha las acciones establecidas en la Hoja de Ruta y de seguimiento al cumplimiento de las metas propuestas.

Chile hoy celebra tener una carta de navegación para transitar hacia una economía circular regenerativa que cree valor para todos y contribuya activamente a la sostenibilidad del planeta.

Bibliografía recomendada: